Sueños Lúcidos

Alguna vez mientras te encuentras dormido y soñando, ¿te has dado cuenta de que lo estás? A este fenómeno se le conoce como Sueño Lúcido.

Un Sueño Lúcido puede ser espontáneo: Estás en medio de un sueño agradable o no, y de repente te das cuenta de que no es real lo que vives. Eso es un sueño lúcido espontáneo. A través de nuestra vida podemos experimentar una o dos veces esta experiencia pero, como un sueño cualquiera, al despertar nos olvidamos de él.

Pierre-Cécile Puvis de Chavannes~El sueño

Ahora bien, también podemos inducirnos los sueños lúcidos. Hay personas que después de haber ejercitado la técnica, han logrado conducir sus sueños a placer; tal vez una parte de ellos o en su totalidad. Esos son los sueños lúcidos inducidos.

Un sueño lúcido inducido perdura en la memoria ya que como se está en un estado de conciencia, deja impregnada la memoria con la experiencia vivida; dentro de las cuales figura todo tipo de esperiencias fantásticas como volar, cambiar de forma, modificar el sitio donde se está soñando en forma total o parcial, mover objetos sin tocarlos, etc.

Dentro de este tipo de experiencia, las sensaciones, colores, sonidos y todo lo que intervenga en ellos; son amplificados.

La mejor manera de empezar a ejercitar la mente para tener un sueño lúcido, es empezar a anotar lo que se sueña cada día. Todas las mañanas, en vez de salir a toda prisa de la cama e iniciar nuestras actividades cotidianas; debemos sentarnos y tratar de anotar lo que se ha soñado. Al principio sólo vamos a recordar fragmentos, anotemos entonces lo que venga a la memoria. Poco a poco se avanzará en este plano y a medida que pase el tiempo seremos capaces de recordar hasta detalles pequeños de nuestros sueños.

Recordar los sueños nos ayuda a nuestros sueños lúcidos ya que, si no recordamos un sueño; tampoco seremos capaces de recordar cuando tengamos un sueño lúcido. Mejorar la calidad de nuestros recuerdos oníricos nos ayuda a reconocer signos que nos pueden ayudar a alcanzar la lucidez.

Otra técnica para retener los sueños es mentalizarse antes de dormir, diciéndonos que a la mañana siguiente se va a recordar el sueño. Incluso se puede hacer una imagen mental de uno mismo, sentado en la cama anotando lo que se ha soñado.

Una vez que se ha llegado a este punto lo que corresponde hacer es anotar antes de ir a dormir, lo que se desea soñar. Puede ser la visita a un sitio específico (como experiencia inicial, los expertos recomiendan que se haga a un lugar conocido y a medida que se va progresando, se puede ir en pos de lugares desconocidos) o conocer la respuesta a alguna interrogante que se tenga y la cual deseemos que nuestro subconciente nos ayude a resolver con el cúmulo de datos que ya tiene nuestra memoria y el cual no usamos en su totalidad.

De ahí en adelante, se puede empezar a experimentar dentro de la etapa del sueño e intentar obtener lucidez dentro del mismo. A veces se puede llegar a experimentar el Falso Despertar que es cuando no se logra controlar el sueño del todo, es soñar que se está despierto. A veces se puede haber estado en lucidez y creer que al ya estar despierto se puede comenzar a realizar sus labores cotidianas. Como en realidad se sigue soñando, entonces el falso despertar lo que conseguirá será sacarnos del estado de lucidez y llevarnos a soñar nuevamente. Para saber si se está soñando o se sigue estando lúcido, lo mejor que se puede hacer es realizar un Test de Realidad.

¿Cómo aprender a darse cuenta que se está soñando? Se puede saber si se está soñando al tratar de localizar las SEÑALES DEL SUEÑO las cuales pueden ser:

Acción: El soñador, otro personaje o una cosa hace algo inusual o imposible en la vida real, como poder volar.
Contexto: El lugar o situación en el sueño es extraño, así como los personajes y demás lugares que aparecen. O estar en un lugar o una situación en la que normalmente no se estaría.
Forma: El soñador, otro personaje o una cosa, cambia de forma, tiene una forma extraña o se transforma. Esto puede incluir la presencia de ropa o cortes de cabello inusuales, o verse a si mismo, como si fuera una tercera persona.
Conciencia: Un pensamiento en particular, una sensación inusual, una emoción fuerte o percepciones alteradas.
Cohesión: Algunas veces el soñador puede "teletransportarse" a un lugar completamente diferente, sea cual sea, sin transición alguna entre los dos lugares.
Tiempo: En el sueño, el soñante puede experimentar saltos temporales (primero es de día y repentinamente es de noche, o viceversa). Así como también poder tener el control del tiempo, pudiendo retrocederlo a voluntad para modificar un hecho indeseado. Este segundo hecho es poco común debido a la dificultad que presenta, dependiendo del grado de lucidez del soñante.

Estos puntos son muy útiles como tests de realidad, ya que como bien sabemos, en los sueños pueden ocurrir cosas que en la cotidianidad no suceden o son imposibles de realizar.

Pierre-Cécile Puvis de Chavannes~El sueño